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La lucha contra la pandemia del coronavirus se suele comparar con una guerra. Nos enfrentamos a un desafío titánico. Pero para triunfar en el frente, es mejor estar alerta, entrenados y bien descansados, no llegar exhaustos. Nuestro sistema de atención médica occidental ha sufrido oleadas de recortes presupuestarios y privatizaciones durante décadas. Nuestra economía ya estaba renqueante antes de recibir el duro golpe de esta crisis imprevista. Después de la de 2008, debemos sacar conclusiones reales de esta crisis del coronavirus y lograr un cambio radical de sistema. Nuestra salud, nuestro futuro social y el clima están en juego.

Cuanto más oscura la noche, más brillantes las estrellas. Ahora es cuando vemos que es la gente común la que hace funcionar nuestro país. No lo olvidemos, ni ahora ni nunca. Ahora que vemos claramente quiénes mantienen este país en marcha, asegurémonos de que no tengan que pagar por esta crisis.

Médicos de Medicina para el Pueblo compraron un stock de 60.000 mascarillas para distribuirlas a sus centros de salud y a otros en el país. "Ya no podíamos tolerar la falta de mascarillas", explica Sofie Merckx, médico general de Medicina para el Pueblo y diputada federal del PTB.

El rey (europeo) está desnudo. Tras años de austeridad, los sistemas sanitarios se derrumban lamentablemente ante el stress-test del coronavirus. Cientos de hospitales a lo largo y ancho del continente están careciendo de camas, de personal, de respiradores y de mascarillas… De medios, en resumen. Las declaraciones de apoyo a los heroicos sanitarios, no serán suficiente. Hay que hacer todo lo posible para detener la epidemia y reconstruir un sistema de salud digno de tal nombre. Esto requiere una toma de decisiones fuerte, a nivel europeo.

El PTB propone introducir un Impuesto Corona excepcional sobre las fortunas de más de 3 millones de euros para garantizar los ingresos de las familias durante la crisis del coronavirus. "La crisis del coronavirus es ante todo una crisis sanitaria. Pero también es una emergencia social, con un millón de personas amenazadas por el desempleo técnico. Es importante tomar hoy medidas para proteger los ingresos de los trabajadores", explica Raoul Hedebouw, portavoz del PTB.

La epidemia es una amenaza que no debe subestimarse. Por nuestra salud primero, desde luego, pero también por nuestro poder adquisitivo. No puede hablarse de trasladar la carga de la crisis a los trabajadores. Aquí está el plan de contingencia del PTB con 7 medidas concretas destinadas a proteger el poder adquisitivo y hacer que las grandes fortunas contribuyan.

El PTB pide que Bélgica cierre las empresas de los sectores no esenciales. "Aprendamos de lo que ocurre en Italia y en el resto del mundo", declaró el presidente del PTB, Peter Mertens.

Los cafés y las escuelas están cerrando, pero la gente todavía tiene que trabajar codo con codo en muchas empresas. Esto no puede continuar. La salud está antes que el beneficio. En este video, Peter Mertens, presidente del PTB, propone cuatro medidas para proteger nuestra salud y nuestros ingresos. Juntos, hagamos retroceder el coronavirus. #cuidaralosdemás

El PTB exige que Bélgica avance en la lucha contra el coronavirus y ha presentadouna propuesta en el Parlamento para poner a disposición los recursos necesarios en el marco de los debates presupuestarios. “Las medidas que están actualmente sobre la mesa están lejos de ser suficientes para proteger a las personas”, dice Sofie Merckx, médico de familia y diputada del PTB. “Esta opinión es compartida también por los expertos internacionales de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Debemos actuar ahora, y poner la salud pública por delante de los intereses económicos a corto plazo.”

El PTB pide el nombramiento inmediato de un comisario nacional para acelerar la lucha contra el coronavirus en nuestro país. Según el partido de izquierdas, ese comisario es necesario para romper la camisa de fuerza institucional y económica que actualmente impide adoptar las medidas necesarias para frenar en profundidad la epidemia.

El domingo 8 de marzo, en toda Bélgica y en todo el mundo, miles de mujeres se levantaron para hacer oír su voz. De Charleroi a Ostende, pasando por Lieja, Bruselas, Gante, Namur, Mons, Kortrijk y Lovaina. En todas partes, las mujeres se han levantado para decir: "Dejen de pagar salarios desiguales, dejen de cometer violencia contra las mujeres y las muchas formas de discriminación que todavía están muy presentes en nuestra sociedad". (Foto: 10.000 manifestantes en Bruselas)(Photo: 10,000 demonstrators in Brussels)

El domingo 1 de marzo, a iniciativa del PTB, más de 10.000 personas se reunieron en las calles de Bruselas en la "Gran Ira", la marcha por una política diferente.